Día 7: Bueño, Lastres y Ribadesella

Kilómetros aproximados: 125.

A las 9 y poco salíamos del hotel con nuestras maletas, justo al lado teníamos la famosa Confitería Rialto, y no nos queríamos ir sin probar sus famosas “moscovitas”, así que compramos una bolsa para llevar.

Era día festivo (San Mateo), así que a esas horas no había nada de tráfico y salimos de la ciudad en un momento.

En 15 minutos llegamos a BUEÑO, un pequeño pueblo con gran cantidad de hórreos, aparcamos justo antes de entrar, donde se encuentra el Centro de Interpretación del Hórreo. Dimos un paseo muy tranquilo por el pueblo, y la verdad que nos gustó mucho la gran cantidad de horreros que vimos, de todos los tamaños y con diferentes utilidades.

Luego en algo menos de una hora, llegamos a LASTRES, aparcamos en la zona del puerto, y primero hicimos paradita en la playa para ver el pueblo desde abajo.

Después con tranquilidad comenzamos a subir y nos dedicamos a recorrer sin rumbo el pueblo por sus inclinadas calles.

Este pueblo ya lo visitamos en nuestro anterior viaje, y posteriormente se hizo famoso a raíz de la serie de televisión “Doctor Mateo”, así que una vez allí buscamos la casa del Doctor Mateo que está en la zona de arriba del pueblo.

Muy cerca se encuentra lo que fue la fachada de la “Taberna de Tom” que salía en la misma serie, una casa que actualmente está en ruinas, pero situada en una terraza con grandes vistas.

Y finalmente por calles y escaleras, llegamos en un momento a la playa y al puerto.

Antes de irnos unas últimas fotos desde la playa; la verdad que este pueblo tiene rincones muy bonitos, y merece la pena verlo desde arriba y desde abajo.

Una vez en el coche, subimos al MIRADOR DE SAN ROQUE, con vistas muy bonitas también.

En media hora llegamos a RIBADESELLA, otra ciudad que visitamos en nuestro anterior viaje. Al llegar fuimos directos a comer, elegimos el Mesón El Labrador, pedimos chorizo a la sidra, huevos rotos con jamón y boquerones; que junto las cervezas, el agua, el pan y un cortado, costó 33 €; la verdad que todo muy rico, y el señor que nos atendió muy amable.

Tras la comida, paseo y subida la ERMITA DE LA VIRGEN DE GUÍA, por el camino y desde arriba, hay unas vistas muy bonitas de Ribadesella.

Regresamos al coche y fuimos al MIRADOR DEL INFIERNO, pero no lo vimos muy interesante, igual si hubiéramos andado más, hubiéramos encontrado panorámicas más bonitas, pero no nos apetecía; muy bonito el paisaje de las montañas.

Pusimos rumbo al Hotel Ribadesella Playa, hicimos el check-in y nos instalamos en un momento.

Como la tarde estaba buena, decidimos pasear por el paseo al borde de la playa, hasta llegar al Mirador Punta del Pozu, donde ya se vía el mar mucho más bravo. A la vuelta nos tomamos un refresco en una terraza del paseo; luego regresamos al hotel y descansamos un rato.

Al fondo la Ermita de la Virgen de Guía; se ve el camino de subida

Cenamos en Café La Playa, yo me pedí unas albóndigas y Alfredo una hamburguesa gourmet que estaba muy rica, la cena junto a las cervezas nos costó 24 €. Luego regreso al hotel que lo teníamos muy cerca.